Dieta vegetariana o vegana en niños: lo que debes saber antes de empezar

Cada vez más familias se interesan por una alimentación vegetariana o vegana para sus hijos. Ya sea por motivos éticos, medioambientales o de salud, esta elección plantea una pregunta clave: ¿es segura para los más pequeños?

Lo más importante no es tanto el tipo de dieta, sino cómo se planifica. Una dieta vegetariana o vegana puede ser saludable en la infancia, siempre que esté bien diseñada y adaptada a las necesidades nutricionales de cada etapa.

Por eso, antes de dar el paso, es fundamental informarse con fuentes fiables y contar con el acompañamiento de profesionales de la salud.

¿Puede un niño seguir una dieta vegetariana o vegana sin riesgos?

Según organismos oficiales como la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Asociación Española de Pediatría (AEP), una alimentación vegetariana o vegana bien planificada puede ser adecuada durante la infancia y adolescencia.

Eso sí, estas entidades insisten en que debe cubrir todos los requerimientos nutricionales del niño, que varían según su edad, etapa de crecimiento y nivel de actividad física. La clave está en garantizar un aporte suficiente de energía, proteínas, vitaminas y minerales para favorecer un desarrollo óptimo.

Nutrientes clave que no deben faltar en una dieta vegetariana o vegana infantil

En primer lugar, hay que prestar especial atención a algunos nutrientes esenciales. Por ejemplo:

  • Hierro: se encuentra en legumbres, frutos secos, semillas y vegetales de hoja verde. Se recomienda acompañar estos alimentos de vitamina C (como naranja o kiwi) para mejorar su absorción.
  • Vitamina B12: no está presente de forma natural en alimentos vegetales, por lo que es imprescindible el uso de suplementos o alimentos enriquecidos.
  • Calcio: además de los lácteos en dietas vegetarianas, se puede obtener de bebidas vegetales fortificadas, tofu, almendras o brócoli.
  • Zinc: presente en legumbres, cereales integrales, semillas y frutos secos.
  • Proteínas: combinando legumbres con cereales (como lentejas con arroz) se logra un perfil proteico completo.
  • Omega 3: fuentes vegetales como las semillas de chía, lino o las nueces pueden ayudar, pero en algunos casos puede recomendarse un suplemento específico de DHA vegetal.

En resumen, no se trata de eliminar alimentos sin más, sino de sustituirlos por otros equivalentes en valor nutricional.

Errores comunes a evitar

En muchas ocasiones, los problemas aparecen por falta de información o por asumir que una dieta vegetal es automáticamente saludable. Algunos errores frecuentes son:

  1. Falta de variedad: limitar los alimentos puede provocar déficits. Es importante incluir una amplia gama de frutas, verduras, legumbres, cereales, frutos secos y semillas.
  2. Abuso de alimentos ultraprocesados: algunos productos veganos industriales pueden ser bajos en nutrientes y altos en grasas, azúcares o sal.
  3. Ausencia de seguimiento profesional: es esencial que un pediatra o dietista supervise la dieta del niño, sobre todo si es vegana estricta.
  4. No suplementar cuando es necesario: especialmente la vitamina B12, pero también otros nutrientes si se detectan carencias.

Por tanto, antes de modificar la alimentación de tus hijos, lo más recomendable es informarse bien y evitar la improvisación. Además, es importante adaptar las porciones según la edad y mantener una buena hidratación diaria.

¿Cuándo consultar al pediatra o dietista?

Siempre que haya cambios en el apetito, pérdida de peso, fatiga frecuente o retraso en el crecimiento, conviene acudir al pediatra. De igual forma, aunque todo parezca ir bien, es aconsejable realizar revisiones periódicas y controles analíticos que permitan detectar posibles carencias a tiempo.

Finalmente, para que todo funcione de forma segura, es esencial rodearse de profesionales cualificados. Los pediatras son quienes mejor conocen las necesidades de cada niño. Por su parte, los dietistas-nutricionistas especializados en población infantil pueden diseñar menús completos, ajustados a la edad y estilo de vida del menor. Asegúrate de que cuentan con formación acreditada y consulta siempre fuentes fiables.

En Grupo IHP apostamos por una alimentación saludable, adaptada a cada etapa de la infancia y basada en evidencia científica. Si estás valorando una dieta vegetariana o vegana para tu hijo o hija, te animamos a consultar con nuestro equipo médico y nutricional. Porque crecer sano es también una cuestión de equilibrio.

La salud y bienestar de los más
pequeños es nuestra prioridad