El estreñimiento en bebés es una de las preocupaciones más frecuentes entre los padres. Si tu pequeño tiene dificultades para evacuar, llora o muestra incomodidad, es normal preguntarse qué hacer para aliviarlo de manera rápida y segura. Aunque en la mayoría de los casos no es un problema grave, es importante saber cómo identificarlo y qué medidas tomar para evitar que se convierta en un motivo de malestar constante.
Desde cambios en la alimentación hasta masajes y remedios naturales, existen distintas estrategias para ayudar a mejorar el tránsito intestinal del bebé. En este artículo, te explicamos qué puedes hacer para aliviar el estreñimiento en casa y en qué casos es necesario acudir al pediatra para una valoración profesional.
Causas del estreñimiento en bebés y cómo identificarlas
El estreñimiento en bebés puede deberse a varios factores. Una de las causas más comunes es la introducción de alimentos sólidos, ya que el sistema digestivo del bebé aún se está adaptando a la nueva dieta. Además, una ingesta insuficiente de líquidos o una dieta baja en fibra pueden contribuir al problema.
Es importante observar si el bebé presenta heces duras o en forma de gránulos, deposiciones dolorosas o poco frecuentes, o si muestra signos de incomodidad al evacuar, como arquear la espalda o llorar.
Remedios efectivos para aliviar rápidamente el estreñimiento en bebés
Medicamentos y soluciones pediátricas recomendadas
En casos donde las medidas anteriores no resulten efectivas, es fundamental consultar con un pediatra antes de considerar el uso de medicamentos. El profesional de salud puede recomendar el uso de supositorios de glicerina para ablandar las heces en bebés que tienen dificultades para evacuar.
Es importante destacar que los supositorios de glicerina están diseñados para usarse de forma ocasional y no deben ser una solución a largo plazo. No se deben utilizar aceite mineral, laxantes estimulantes ni enemas para tratar el estreñimiento en bebés sin la indicación expresa de un profesional de la salud.
Si el estreñimiento del bebé persiste a pesar de los cambios en la alimentación y otros remedios caseros, o si está acompañado de síntomas como vómitos, debilidad, pérdida de apetito, sangre en las heces o hinchazón abdominal, es crucial consultar al pediatra. Estos signos pueden indicar una afección subyacente que requiere atención médica y es fundamental buscar la orientación de un profesional de la salud.
Para obtener más información y apoyo, puedes contactar con los especialistas en nutrición pediátrica de Grupo IHP.