El diagnóstico de celiaquía en un niño supone un cambio importante en su alimentación. La buena noticia es que, con una correcta planificación y algunos consejos prácticos, llevar una dieta sin gluten puede ser sencillo y seguro.
¿Tu hijo tiene celiaquía? Esto es lo primero que debes saber sobre su dieta
La celiaquía es una enfermedad autoinmune que afecta a 1 de cada 100 niños en España. En ella, el sistema inmunológico reacciona al gluten, una proteína presente en trigo, cebada y centeno, dañando la mucosa intestinal. Esto impide la correcta absorción de nutrientes.
Los síntomas más frecuentes en niños pueden incluir:
El único tratamiento eficaz es una dieta estricta sin gluten de por vida. No basta con reducir su consumo: incluso pequeñas cantidades pueden causar daños, aunque no haya síntomas visibles.
Niños con celiaquía: alimentos permitidos y prohibidos
Una alimentación sin gluten puede ser tan variada y saludable como cualquier otra, si se conocen bien los alimentos seguros.
Los alimentos naturalmente sin gluten incluyen las frutas y verduras, carnes, pescados y huevos frescos, legumbres, arroz, maíz, quinoa, patata, leche y lácteos sin procesar.
Dónde hay que prestar especial precaución es con los productos procesados. Muchos alimentos industriales pueden contener trazas de gluten, aunque no lo parezca: embutidos, salsas, cereales, dulces… Por eso, es clave leer las etiquetas cuidadosamente.
Busca productos con certificación “sin gluten”, controlados por asociaciones de celíacos o reglamentados por el Reglamento Europeo (menos de 20 ppm de gluten).
Cómo evitar la contaminación cruzada: claves para una cocina segura
En casa, es fundamental extremar la higiene para evitar la contaminación cruzada:
Fuera de casa, como en restaurantes, comedores escolares o cumpleaños, informa con antelación y explica bien qué es la celiaquía. Educar a abuelos, profesores o monitores es una parte esencial del cuidado.
Alimentación sin gluten fuera de casa para niños: cómo planificar sin estrés
Salir de casa no debe convertirse en una preocupación constante. Una buena planificación ayuda a evitar riesgos y disfrutar del momento.
En resumen, una dieta sin gluten puede ser fácil de llevar si se cuenta con información clara y apoyo. En Grupo IHP estamos comprometidos con la salud infantil y te animamos a consultar siempre con tu pediatra ante cualquier duda.