La urticaria y el angioedema (también conocidos como "sarpullidos") son reacciones cutáneas que se manifiestan en la parte superficial de la dermis, en este caso a modo de “ronchas".
El angioedema suele afectar a la cara, especialmente en los labios, mejillas, pudiendo afectar también a la lengua, faringe o laringe, puede ser dolorosa y persistir durante varios días.
Por su parte, las lesiones de urticaria aparecen en cualquier parte del cuerpo y a cualquier edad, aunque en niños y adolescentes la urticaria aguda es más común, rara vez están presentes pasadas 24-36 horas.
En ambos casos, los dermatólogos tienen un papel fundamental en la identificación de las lesiones cutáneas que se producen en los casos de urticaria y angioedema, lo que ayuda a establecer el diagnóstico.
La urticaria y el angioedema pueden ser causados por:
La urticaria presenta los siguientes síntomas:
El angioedema, por su parte, aparece en forma de:
De forma general, el tratamiento se basa en el uso de antihistamínicos y de corticoides orales. El especialista determinará en cada caso el tratamiento adecuado.
Fundamentalmente son la dificultad respiratoria y la anafilaxia. A veces pueden surgir complicaciones graves del angioedema, que requieren tratamiento intensivo y atención de urgencia.
Una vez establecido el diagnóstico, la prevención se basa en la identificación y la eliminación de las causas endógenas y exógenas que lo puedan provocar (fármacos, alimentos, factores físicos como el calor, el ejercicio, etc), así como el tratamiento profiláctico con antihistamínicos y/o corticoides orales a dosis bajas, individualizando cada caso en particular.
Si tu pequeño presenta síntomas de alguna de estas reacciones, contacta con nuestros especialistas en dermatología.