Marta Rivas, psicóloga de Grupo IHP, explica que los cambios de comportamiento en nuestros hijos son un indicador de que algo ha cambiado en su percepción del mundo. La especialista señala que estas alteraciones se pueden observar a través de los hábitos de sueño, las ganas de jugar o el hecho de estar muy enfadados, entre otras variables.
Rivas destaca que es importante transmitirles que es normal sentirse mal y, sobre todo, acompañarles en ese malestar. "La forma en que nosotros gestionemos estos cambios es lo que va a determinar que sean regulados o no por los adultos y no por ellos mismos. Un niño no puede autorregularse solo", explica.
En las consultas, este tipo de conductas se trabaja de manera individual con el niño y también con los padres, para que estos comprendan qué subyace en este tipo de comportamientos.