La vuelta a la rutina en septiembre y comenzar de nuevo la jornada escolar resulta a veces difícil de llevar para nuestros pequeños. Saber cómo gestionar este retorno y ayudarlos en esta nueva etapa es fundamental para que se sientan cómodos y acudan siempre a sus obligaciones de la mejor forma.
El coordinador del método Aprender a Educar de Grupo IHP, Pedro García Aguado, nos indica mediante una serie de consejos qué podemos hacer para saber gestionar este nuevo comienzo para ellos:
- Marcar un horario desde el primer día para que se vaya acostumbrando a él, por supuesto se deben acostar a una hora prudencial según la edad y levantarse con suficiente tiempo para no ir con prisas.
- Normalmente al principio les cuesta salir de casa a tiempo, acostarse a la hora, ponerse a hacer los deberes en el horario establecido. Debemos entenderles. No debemos perder la paciencia ni gritar, tampoco permitir que no cumplan con el plan establecido. Esto ayudará a que se adapten al ritmo de instituto o colegio lo más rápido posible y las cosas empiecen con buen pie.
- Conocer a los amigos con los que se reúnen en el colegio o instituto es fundamental: si ha cambiado de colegio o instituto, o bien ha cambiado de amigos (esto es normal en la adolescencia) y no se les conoce, se puede hacer una fiesta o buscar un evento donde nos sea posible conocerlos. Los amigos son un pilar fundamental, sobre todo en esta etapa de sus vidas.
- Evitar la sobreprotección: nuestros hijos deben saber solucionarse los problemas y sobre todo aprender a ser autónomos. Esto les ayuda a madurar y les hace más responsables y aumenta su grado de satisfacción.
- Pedir una reunión con el tutor o tutora lo antes posible para saber cómo va nuestro hijo o hija en el colegio o instituto: sobre todo ir a un encuentro con los profesores ayudará a los hijos. Los profesores quieren lo mejor para sus alumnos, aunque su forma de hacerlo no nos guste, deberemos ir a una con ellos.
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Es muy aconsejable que se apunten a alguna actividad extraescolar. Estas ayudan a socializar mejor a los chicos, los distrae y entretiene aprendiendo. Debemos buscar una que les guste, las obligaciones están en el colegio. Pero si comienzan una actividad, deben terminarla. Cuando han tomado la decisión, han de asumir su responsabilidad.
- Deben realizar ejercicio físico, algún deporte en un club o simplemente en compañía de familia o amigos. El deporte ayuda a regular el organismo y les relaja, haciendo que sea más fácil concentrarse, dormir y tener una vida activa. Además adquieren hábitos saludables.
Artículo original publicado en: Aprender a Educar