¿Cómo te sientes tras haber recogido este premio?
Me siento muy halagado, ya que siempre es gratificante que reconozcan el trabajo realizado. También se le añade la motivación por seguir trabajando y superarme como profesional día a día.
¿Cuáles crees que son las cualidades por las que se te ha valorado para ganarlo?
Aunque creo que es una pregunta que debería contestar mejor el jurado, en mi opinión, la originalidad con la que hemos querido abordar la frecuencia de seguimiento del niño celiaco, incluyendo el uso de herramientas novedosas, como la detección de gluten en heces y en orina, han podido ser clave en la elección.
Desde el punto de vista de la profesión, ¿cómo ves la evolución de tu especialidad en el ámbito nacional e internacional?
Cada vez existe más conocimiento de las enfermedades digestivas pediátricas, debido al auge en cuanto a incidencia y complejidad que estas están teniendo. Este aumento ha motivado que sea una especialidad en continua renovación e investigación para mejorar la respuesta en nuestros pacientes.
¿Tienes algún proyecto en mente, relacionado con tu área, de cara al próximo año?
Estamos trabajando actualmente en un proyecto con otros centros andaluces sobre preparación colonoscópica en niño. También estamos a punto de comenzar un ensayo clínico con un nuevo fármaco que puede ser muy interesante en pediatría.
Por otro lado, queremos colaborar, desde un punto de vista docente, en la formación de residentes mediante la realización de cursos y jornadas que expliquen la patología digestiva.
¿Qué mensaje transmitirías a aquellos jóvenes profesionales que se inician en esta especialidad?
La elección de pediatría, sea la subespecialidad que sea, siempre es acertada. Es un trabajo muy gratificante, pero tienen que saber que es tan necesaria una gran formación profesional como humana.